Para Victoria, Natalia, Pablo, Hernán, Lionel, Ramiro, Cielo, Facundo y Dannae
La mayor trampa que ofrece el tiempo es la vejez, ese modo que es tentado a suponer la trayectoria de las cosas y asumirlo como sabiduría. La experiencia trae también un cierto desgano. Una apatía. Un desdén y una dificultad de ver no solo lo que está lejos, sino lo que está cerca. Existen anteojos para ello. Para desestabilizar aquello y enfocar bien se necesita algo sumamente potente, por ejemplo, un niño descubriendo una hormiga, algo mucho más potente que una granizada en un desierto. Esto confirma que la trampa de la vejez siempre puede ser sorprendida por la estrategia de la vida. Eso me pasó a mí hace un rato. El otro día, volví a Rosario, lo hice porque Facundo me contactó para que lleve “Siempre Guardavidas” a un festival cuyo objetivo era construir un teatro. Primero creí no entender, ya que en ningún momento me pidió que lo haga como un favor. En estos tiempos donde uno se acostumbra a ver bajar a Jesús de la cruz, sacarse el maquillaje y pedir una coca fría mientras aspira algo que le deja talco en el bigote, que alguien te contacte de ese modo me pareció surrealista. No hay nada más raro en este tiempo que aquellos seres que no tienen nada que ocultar y que quieren cumplir sus objetivos cumpliéndolos. Los conocí en Rosario. Se hacen llamar “La comedia de hacer arte”, ¿cómo puede ser
que nunca había escuchado hablar de un grupo de teatro con 28 años de antiguedad? He vivido con el teatro de los Andes en Bolivia, viví con Malayerba en Ecuador y conocí de cerca muchas experiencias de teatro grupales, y vi como todos debieron, por diversas razones, reconfigurarse, pero la comedia aquí está, más joven que nunca. En cuatro días, “La comedia…”, esa docena de seres, acariciaron mi corazón y el de mi familia entre risas, comidas, teatro, y un propósito imposible, construir un teatro en un país que parece destruirlo todo. Una mañana, en su casa, Pablo nos contó que al principio una psicóloga social acompañó al grupo constantemente y tal vez esa fue una de las tantas acciones que hicieron que continuaran juntos, sin un guía, hasta que, 28 años después, se lanzaran al objetivo mayor, construir un teatro desde sus cimientos. Amanda dice que estar con la gente de “La comedia…” es estar contenta, es sentirse amiga, es como lo que vivió desde que gateaba en los retiros que cada año hicimos con gente que no se conocía y que gracias a favorecer la debilidad nos aproximamos. El festival que ellos organizaron tuvieron tres sedes: el teatro que están construyendo, que ya tiene techo, uno de los galpones culturales que el municipio de Rosario reconstruyó con fines culturales y La Vigil.

Vecinos realizando mural en una de las paredes de La Vigil
A mí me tocó presentarme allí, en la Vigil. Uno de los teatros más hermosos que vi en este país. Llegamos de mañana y tres horas después, caí en la cuenta de algo que encontramos con Severo, la mayoría de nosotros, igual que el Eze, del ángel de la valija, no percibe a los ángeles que lo rodean. Cerca del mediodía habíamos colgado toda la maquinaria que permitiría que el público vea los dibujos con yerba que hace Juárez, Damián, el técnico de la sala, en esa pausa se dispuso a contarnos la historia de la Vigil. Rosi, Laura y las nenas se sentaron en el escenario mientras Damian contaba. No sé si Fito, se inspiró en ellos para escribir “Quien dijo que todo está perdido, yo vengo a ofrecer mi corazón” La Vigil nace en el año 44, hace 80 años, vecinos jóvenes del barrio de Tablada, se encargan de la comisión directiva de una asociación vecinal, sueñan y concretan en partes iguales. Tienen una idea revolucionaria: hacer una rifa infinita y con ella construyen una biblioteca, una escuela, dos escuelas, tres escuelas, un parque, un teatro, un observatorio. Justo en el momento que han construído una comunidad vienen los milicos y se roban todo. Porque es importante decirlo, la muerte, la tortura, la desaparición son mecanismos que sintonizan perfectamente con los ladrones. En el 83 vuelve la democracia pero la Vigil no. La democracia va a demorar 30 años para devolverle la Vigil a los vecinos. Escuchamos esta historia y no puedo parar de mirar a Facundo mientras pienso que nos conocemos hace más de 20 años, él estaba terminando de estudiar teatro en la escuela provincial cuando todo su curso, que se recibía, organizó la presentación de todos mis espectáculos en la escuela. Yo lo miro y pienso que caí en una trampa, me dijo que venga a presentarme pero en realidad no es así me llamó para darme un regalo. A la noche, abro el regalo. Todo sale bien. El público, ríe, mucho, mucho, mucho y después llora, mucho, mucho, mucho. Suben decenas de personas al escenario para ver los dibujos con yerba y conocer a Juanito. Un hombre de unos 75 años se me acerca, me pone la mano en el hombro. Yo quería que no termine. Pedía por favor que no termine. Una pareja se acomoda a mi lado, a mi me sonaba Sergio Mercurio, por «El Ángel de la Valija», por eso vinimos. Ella, lo interrumpe, tu obra mantiene a lo largo de las escenas, mezclada con humor, sorpresa y belleza un asunto que se abre en la primera escena: si alguien
se equivoca hay que salvarlo. Se me acerca una de las chicas de la comedia, Cielo, qué lindo que es cagarse de risa con un amigo, que lindo saber que él al final nos llevará al mar. Damián el técnico del teatro se me acerca todavía llorando, yo sabía que algo así podía pasar, me di cuenta por la luz, pero no me imaginé tanto. Entonces empiezan las buenas noticias. Son otros regalos. El año que viene, el año que viene, el año que viene y el año que viene. Al salir del teatro el festival estará en apenas su segundo día. Esa noche, Pablo hará que comamos los mejores ravioles del mundo, Victoria se acercará amorosa a Amanda, Ramiro hará que toda la comedia salte en el patio cantando, igual que en la cancha, con la letra del mejor elogio que recibí en toda mi trayectoria. Al otro día veré por primera vez en mi vida a la actriz Dinamarquesa Iban Nagel Ranmunsen, será un modo de cerrar definitivamente un libro que leí en el año 93, un libro que configuró un modo de hacer mi trabajo y cuyos pasajes tengo en mi memoria. Más tarde volverá el encuentro, las canciones, la risa y una potencia de vivir en aumento. En alguna parte del libro ciudades invisibles, de Italo Calvino, el autor afirma que el infierno existe y es aquí, está aquí, no hay modo de esquivar los ojos de Dios, no hay manera de postergarlo, vivimos en un planeta donde está el infierno. Enseguida afirma que el paraíso también existe y también es aquí. Como puede suceder cierta perplejidad, Calvino ensaya el posible camino. La vida se trata de construir el propio paraíso y una vez que uno percibe que los cimientos están creados, que está puesto el techo y cierta débil estructura nos permite vivir el presente, puede uno tomar un catalejo o apenas alzar la vista para, que en un mar de islas, observar quienes se han montado en el mismo propósito: construir paraísos. Una vez que uno observa ello debe dejar la puerta de su casa disponible y pasar en resto de la existencia visitando el paraíso de los otros y recibiendo a los bienaventurados en el paraíso propio. El ejercicio demostrará que los otros paraísos están cerca. Cuando a la noche, informé que en la mañana regresaríamos, Ramiro miró a Vanesa que con la guitarra comenzó a acompañarlo. Cerca, Rosario siempre estuvo cerca y eso es verdad. Juro que en ese momento entendí la canción. Al llegar a Banfield y entrar a casa pusimos a Fito, pasan los días y sigue sonando.

La Comedia de Hacer Arte en el teatro que construyen
Quiera que el tiempo, el camino que he intentado hacer, merezca que me pongan al lado de todo esto y me consideren como otra de estas islas. De estas gentes. Ojalá, mi familia, mi amiga, ojalá mi trabajo merezcan que sea considerado como parte de lo mismo, de los que insisten sin resistir, de los que
gambetean el destino, a pura risa, de los que construyen, de los que aunque estimen que hacen poco, para lo mucho que se proponen, traen, crean y comparten ALEGRÍA y un poco más de calma. Ox Alá. Ojalá que la trampa de la vejez no nos impida ver. Ojalá nos demos cuenta que todo, todotodotodo sigue estando cerca.







14 respuestas
Abrazo grande.
Todo. Más cerca de lo que creemos y pensamos; sentimos cerca y me sentí muy cerca de este relato, Sergito. Mirá como será de fuerte la energía de paraíso, que mientras te leía con total alegria (hasta imaginando a Amanda feliz disfrutando de esa maravilla que contás y que sucedió) pensaba que mientras vos estabas en Rosario viviendo esa epifanía, yo estaba en BS As con dos rosarinos hablando de vos y de La Vigil…
Así es la vida de hermosa!! Te quiero, pibe!!
conmovedor
lido. lindo. oxalá e abraço… y cerca ; )
Emocionante Mercurio.
Gracias Sergio, fué hermoso recibirles y compartir! Un gran regalo que nos dimos: conocerte de cerca y a tu familia/compañía. Esto es solo el principio! Abrazos
La utopía se construye
Gracias por regalarnos tu amor y gracias por acompañarnos con tu trabajo!
Estamos, seguimos, muy emocionados por todo lo que sucedió (y sigue…)
Y acá estamos, cerca
Te mando un abrazo muy grande
Sergio, querido amigo. Por fin, conociste a rosario ! La ciudad donde la gente tiene corazon.
Qué hermoso relato, Sergio. Qué hermoso fue conocerte a vos, a Rosi, a Amanda, a Violeta, a Laura. Es como si siempre hubiéramos estado cerca sin conocernos. No es tan habitual, no pasa siempre, los años también nos dicen eso.
Abrazo
«Si alguien se equivoca, hay que salvarlo.»
Hermano, al leer esto, me inundan los recuerdos de ArteEulalia, donde forjamos en ese pueblo minero un festival cultural. Sergio Mercurio, al lado de sus personajes, dejó su esencia convertida en cultura; todo, todo, todo fue mágico!
Rosario, es el nombre de mi madre.
Rosario dónde de nuevo dejaste tu esencia, es un campo de resistencia, un motivo para sembrar sueños y verlos florecer.
¡Larga vida a ese teatro, que será un referente en toda Latinoamérica!
Un abrazo, hermano.
Gracias Sergio por tu visitia junto a tu comapñia/familia y ser parte de EN OBRA, conocerlos de cerca es un verdadero regalo, se produjo el encuentro y brindo por eso, por este primero, portal de muchos otros que vendrán…sigamos cantando arriba y abajo del escenario, a voz en cuello con la entera convicción de que con otrxs es mejor, entre muchxs!
abrazo
Te amo Sergio, tu paraiso puede visitar mi paraiso! Te espero! esos escritos que tal vez se hagan menos, siempre seran leidos!
Intercambios de energias, de lo vivido por las palabras, a ti te viene bien!
Saludos a toda la familia. Ahorita desde Suiza donde , con mi hermana, hemos colgado una magnifica exposicion de las obras maternas!
Pronto de vuelto al SAlvador!
Abraxos
muchos abrazos Sergio querido y a la familia
Bravo !!!!!!!!